El 2020 será recordado como el año en que el mundo cambió por completo, se transformó la forma de trabajar de las empresas, hizo que se priorizará la salud de los trabajadores, modificó la manera de relacionarnos, y revolucionó el futuro de la arquitectura sustentable con el propósito de cumplir con la agenda de objetivos de desarrollo sostenible.
Futuro de la arquitectura: ciudades y comunidades sostenibles
Arquitectura sustentable
Si bien, el desarrollo sostenible y sustentable no es un concepto nuevo, recientemente ha adquirido mayor importancia, debido al crecimiento desmedido de la población y el aumento en la contaminación. Es por ello que la ONU prioriza, dentro de sus Objetivos de Desarrollo Sostenible, reducir el impacto ecológico de las urbes —responsables de 70% de las emisiones de carbono mundiales—, dar acceso universal a zonas verdes y espacios públicos, e impulsar el uso eficiente de los recursos.
Con la naturalización de los entornos se busca minimizar el impacto climático y alto consumo energético asociado a las urbes. Este proceso se logra por medio de la protección, gestión y restauración de ecosistemas a fin de aprovechar estos medios naturales para beneficio de todos. También repercute en la economía y seguridad de las poblaciones, al minimizar el impacto de las inundaciones, darle doble vida a los residuos, y contribuir a adquirir hábitos saludables.
Sin vista al precio, pero sí al futuro: contratación verde
Otro panorama para el desarrollo sostenible y sustentable de las ciudades, es la contratación verde para la construcción de edificios públicos. Esta debe anteponer la compra de servicios, productos y materiales sustentables, por encima del dinero, para garantizar un impacto mínimo de contaminación. Para elegir los mejores materiales y proveedores sustentables, es importante considerar aquellos que tengan altos estándares de calidad, lo cual se puede identificar por medio del uso de tecnologías y procesos sustentables, como en el caso del acero DEACERO.
Una esponja de mar VS un puente moderno
Una de las tendencias arquitectónicas que también se ve a futuro, es la construcción de celosías bioinspiradas en el esqueleto de una esponja marina. Recientes investigaciones, descubrieron que el esqueleto de las esponjas de vidrio combina fibras diagonales y paralelas, fusionadas con una rejilla cuadrada, lo que forma un patrón robusto y altamente resistente. Esto, llevado al plano real, soporta más cargas pesadas sin doblarse, que las celosías tradicionales, aumentando un 20% la resistencia general.
Si bien, desde el S. XIX ya se usan diseños con vigas diagonales, estas no han funcionado de forma eficiente: impiden la construcción de edificaciones más altas y desperdician mucho material. Por ello, esta nueva tendencia también es una alternativa para el desarrollo de ciudades y comunidades sostenibles, ya que disminuirá el uso de recursos para la construcción de puentes y rascacielos. A esto se le puede sumar, incluso, su fabricación con acero sustentable, el cual garantizará procesos de construcción amigables con el ambiente.
Las diferencias DEACERO
DEACERO incorpora tecnologías y procesos para contribuir con la arquitectura sustentable de las ciudades. Por medio de sistemas innovadores incrementa la eficiencia energética, reduce sus costos de producción y ayuda a crear acero más resistente y durable. Por otro lado, reúsa material ferroso, proveniente de 21 centros de reciclaje, para la creación de acero sustentable, que disminuya la generación de residuos y emisiones. Así, el 98% de los residuos son transformados en subproductos, que son utilizados posteriormente en industrias como la agrícola, de construcción, petrolera, entre otras.
Hoy más que nunca la sustentabilidad, la visión de calidad y la eficiencia energética están determinando la construcción, y en DEACERO tenemos claro nuestro objetivo de formar parte de construcciones revolucionarias, a través de materiales sustentables.